El azar es una epopeya, pero ya acabada, 
Todos los actos son prisioneros 
De esclavos con barba de anciano 
Y las palabras habituales 
No tienen valor más que en su memoria. 
Al azar todo lo que se quema, todo lo que atormenta, 
Todo lo que se utiliza, todo lo que muerde, todo lo que mata 
Pero lo que brilla todos los días 
Es la conjunción del hombre y del oro 
Es una mirada prisionera de la tierra. 
Al azar una liberación 
Al azar una estrella hilante 
Y el eternal cielo en mi cabeza 
Se abre más ancho a su sol 
A la eternidad del azar.
 
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