Características generales de la narrativa de
Francisco Espínola:
1) Delicadeza:
"A mi no me gustaba la literatura gauchesca (confiesa el escritor), yo quería algo más delicado". ¿En qué consiste esta delicadeza?
Carlos Maggi lo explica: "Contar subjetivamente, atendiendo al mundo interior de sus personajes y no a la pura acción exterior".
Sus narradores no son simplemente realistas. Él busca los matices interiores, en un intento de ampliar la perspectiva para recrear, contando, las peripecias humanas.
2) Preocupación formal:
Espínola hizo oficio de la escritura. Se preocupó por la forma de escribir y el lenguaje que había de usar, adelantándose a la llamada "generación del '45" para quienes la preocupación formal tenía una importancia fundamental.
3) Imaginación poética:
Espínola plantea las situaciones dolorosas, difíciles o patéticas con una imaginación poética que hace que no estén impregnadas de sufrimiento. No hay sin embargo, ni sátira, ni ironía. Se tratan los temas con un humanismo tierno que pone un aura cordial a la historia contada.
4) Religiosidad:
El sentido cristiano late en la obra entera de Espínola, de tal forma que aún en los cuentos en los que no aparece directamente, de alguna forma subyace.
Aquí "los malos" no están condenados o jerarquizados por su condición social.
En Espínola "el malo" puede ser "bueno" y "el bueno" pecar de indiferente o duro.
Las diferencias entre uno y otro se diluyen y el individuo adquiere toda su riqueza, se vuelve más libre de su pasado y de su medio.
5) Humor:
La gracia para contar es una virtud que agilita el relato, lo afina y salpica de interés en los momentos exactos.
Especialmente en algunos relatos, como en "Las aventuras de Don Juan el zorro", en "Saltoncito" y en algunos aspectos de "Pedro Iglesias", así como el tono amanerado del "Diablo" en "Rodríguez", el humor oficia de hilo conductor.
6) Paisaje:
El paisaje no juega un rol preponderante en ninguno de sus cuentos, pero acompaña los episodios.
A veces el paisaje está personificado, como en "El hombre pálido", o en "El milagro del hermano Simplicio".
La naturaleza recrea el estado de ánimo de los personajes.
7) Acción:
La acción en los cuentos puede volverse rápida o retardarse según la intención del autor, y se puede establecer una correspondencia entre el estado de ánimo de los personajes y la acción, como habíamos visto que sucedía también con el paisaje.
La acción se enlaza con otro elemento: el tiempo.
8) Tiempo:
El tiempo interior del relato es acompañado por el tiempo de cada frase; más rápidas y ágiles, más lentas o cortadas según el "clima" que el autor quiere lograr.
El manejo del tiempo constituye una de las principales virtudes de "Paco" Espínola.
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