Transmisión del poema
Podemos distinguir dos etapas:
a) etapa aédica: la transmisión del poema es exclusivamente oral, sin que esto excluya la existencia de un texto escrito. Se caracteriza por el estado de permanente elaboración del poema. Recitación pública y fragmentaria, por episodios sueltos o ligados temáticamente;
b) etapa rapsódica: corresponde a la fijación definitiva del texto y a su conservación escrita. Esta etapa culminará en el siglo VI, cuando los Pisistrátidas traten de fijar un texto único de los poemas homéricos.
Conservación del poema:
La difusión del poema y el interés del público por conocerlo; las exigencias escolares, no solamente de los cantores profesionales, sino de los maestros; la actividad ininterrumpida de la tradición, etc., llevó desde temprano a la necesidad de conservar un texto depurado del poema. El papiro egipcio es llevado a la Hélade en el siglo VI por los colonos de Naucratis, posiblemente, y este será el material de conservación que, aunque perecible, permitió una mayor difusión que el anterior, las tabletas recubiertas de cera, hacía poco factible.
Pero las ediciones de la Ilíada, y también de la Odisea, estuvieron lejos de estabilizar un texto único (vulgata). Una preocupación de los eruditos alejandrinos de los siglos IV y III fue la de fijar el número de versos de la vulgata, reconociendo en el texto versos y aún pasajes ajenos a lo que consideraban el texto homérico. Por otra parte, la actividad de los comentadores o simples lectores del poema, complicó la tarea; la costumbre de transcribir marginalmente un verso ya leído al efectuar la lectura de un pasaje similar al que lo contenía, la de agregar (fabricándolo) un verso apócrifo, dificultó enormemente la tarea de los copistas.
Estos, simples amanuenses, al encontrarse con versos escritos marginalmente, los incorporaron automáticamente al texto sin mayor preocupación porque resultara aumentado el número de versos del poema. Y así como agregaron mecánicamente, cometieron errores de lectura de la copia. Toda esta actividad, consciente o inconsciente, la podemos resumir en los siguientes procesos que han determinado el texto que nos ha llegado:
· interpolación: consiste (a) en la repetición de un verso homérico en otro lugar porque su sentido permite adecuarlo al nuevo pasaje; (b) en la inclusión de un verso no homérico pero construido, ya sea con fragmentos de dos o simplemente con la técnica tradicional, como lo hemos mostrado anteriormente;
· supresión: como resultado de la tarea de los críticos alejandrinos, muchos versos fueron señalados como espúreos (no homéricos). Si bien Aristarco se limitó a señalarlos con un signo especial no es imposible que en muchas versiones hayan sido simplemente eliminados;
· variante: las más notables son las de comparaciones. El mismo tema está acompañado de dos o tres comparaciones sucesivas, como si el aedo las hubiera dejado allí para elegir una de ellas en el momento de la recitación. El copista reprodujo todas las comparaciones, como ocurre en los cantos II y III.
Todo este proceso señalado se pretendió evitar con la fijación de textos oficiales del poema (versiones de las ciudades, cuya pureza u ortodoxia está en función de los concursos de recitadores de epos, entre otra cosas) conservadas y cuidadas por el estado. Pero junto con ellas debemos mencionar las ediciones de las bibliotecas alejandrinas, resultado de una tarea crítica a la que no estaban sometidas las anteriores y menos las ediciones particulares hechas para una persona. Para destacar que las oficiales no eran muy ortodoxas, señalaremos que muchas veces la propia ciudad estaba interesada en figurar en el poema por razones de política panhelénica y hacía interpolar versos que la favorecían en la antigüedad de sus méritos.
Extensión y división del poema:
Manejándose los 372 papiros conservados y las citas de versos del poema incluidos en otros textos literarios o de historia, etc., se ha determinado la extensión de nuestra vulgata en un total de 15693 versos.
La división en cantos se atribuye tradicionalmente a los alejandrinos del siglo III, y estaría motivada por la necesidad de citar el poema por la doble entrada, del canto y el verso. El número de veinticuatro para los dos poemas (Ilíada y Odisea) corresponde al número de letras del alfabeto helénico. Incluso la expresión canto sería moderna, llamando simplemente a cada división "letra".
Por el mismo carácter episódico del poema, esta división debió ser anterior a la actividad erudita alejandrina. Lo que no podrá determinarse es la extensión de cada canto, pues a veces los cortes parecen netos y naturales, otras veces, en cambio, arbitrarios.
· Podemos pensar la estructura de la Ilíada como una sucesión de partes desiguales, conteniendo cada una, una narración episódica completa.
Tema :
De acuerdo con el título tradicional (Ilíada) el tema del poema es la ciudad de Ilión, centro de la región denominada Tróade (Troya) nombre este que fue empleado como sinónimo de Ilión. Por extención temática, Ilíada es el poema de la destrucción de Ilión al cabo de un sitio que duró diez años. Pero de la lectura surge claro que:
· la Ilíada no comprende el total de la guerra sino solamente los sucesos ocurridos durante cincuenta y un días del noveno año de sitio.
Con salvedades, la guerra de Troya no es sino el marco general del poema, o mejor dicho, la circunstancia en la cual se produjo el episodio que da origen a la narración. El poeta se encargó de establecer los límites de su relato: cantará los hechos acaecidos
"desde que/
se separaron disputando por primera vez/
Agamemnón rey de hombres y Aquiles divino".
Pero a este tema de la disputa, que el poeta concreta en la expresión "cólera de Aquiles" se le une un tema que es consecuencia directa del anterior: la "voluntad de Zeus".
Cólera de Aquiles - Voluntad de Zeus, son los dos temas ligados que desarrolla la Ilíada.
Los podemos definir como temas conductores de la narración, que permiten la continuidad y unidad episódica del poema, toda vez que los sucesos narrados se organizan sistemáticamente en torno a ambos temas.
A pesar de lo señalado al comienzo, la Ilíada contiene una narración completa de la guerra de Troya, de sus antecedentes y de sus consecuencias finales. Todo este material se encuentra en estado fragmentario, disperso por todo el poema y podemos reconstruirlo de acuerdo con los pasajes siguientes para cada momento de la leyenda:
Anteriores a la narración de la Ilíada:
· rapto de Helena;
· negociaciones previas;
· reclutamiento del ejército aqueo;
· partida desde Aulis;
· viaje;
· llegada a Troya;
· episodios del sitio;
· saqueos de otras ciudades
posteriores a la narració de la Ilíada
· muerte de Aquiles
· destrucción de Ilión;
· destrucción del muro aqueo.
0 comentarios :
Publicar un comentario